Todos hemos tenido alguna vez una mala noche o hemos tenido los ojos hinchados después de cenar comida muy salada. Sin embargo, cuando las bolsas y ojeras son más frecuentes y marcadas y no se deben a estas causas, tienes que hacer algo para combatirlas. Esto es relevante cuando son síntomas de envejecimiento. Presta atención que en este artículo te contamos todo lo que debes saber.
Bolsas y ojeras: qué son y por qué se producen
En primer lugar, debes tener presente que no son lo mismo las bolsas y las ojeras.
Las ojeras son una coloración morada o azulada que surge en el contorno bajo los ojos cuando no dormimos lo suficiente o estamos fatigados. Aparecen tanto en hombres como mujeres y se deben a que la piel es más fina por debajo de los ojos. Por eso los pigmentos quedan a la vista en esa zona y también los vasos sanguíneos.
Cuando estamos cansados, se produce la dilatación de estos vasos, haciendo visible la irrigación sanguínea a través de la dermis. No obstante, seguramente habrás visto a personas que tienen mayor coloración en esta región, da igual que descansen o no. Esto se debe a la predisposición genética, que hace más perceptible los pigmentos en esta zona. De hecho, en el mediterráneo hay más personas que tienden a poseer esta coloración en el contorno de ojos.
Por su parte, las bolsas consisten en la hinchazón bajo los ojos. Se deben también a que la dermis en esta zona es más fina y aparecen cuando los depósitos de grasa se forman fuera de las cuencas. No son una enfermedad, pero preocupan estéticamente. Pueden aparecer por muchos motivos: deshidratación, mala alimentación, alergias, falta de sueño, cambios climáticos o por factores hereditarios.
Las bolsas y ojeras pueden surgir o acentuarse con la edad, ya que, según avanzan los años, la piel del contorno de los ojos es cada vez más fina.
¿Qué podemos hacer para tratarlas?
Seguro que has oído muchos remedios caseros para tratarlas, ¿los has probado? Dependiendo de la persona, unos u otros son efectivos. Asimismo, hay quien lo ha probado todo y prefiere pasar por el quirófano. De hecho, la corrección de bolsas oculares es el retoque estético más frecuente en los hombres.
Por nuestra parte, te animamos a probar alguna de las siguientes soluciones, que han demostrado ser las más efectivas.
Duerme bocarriba y con almohada
En general, cualquier solución que evite la acumulación de líquidos en esa parte es buena y entre ellas destaca esta. Así, dormir con la cabeza más alta (con una almohada un poco más gruesa o poniendo dos) y boca arriba es una estupenda idea. ¡Siempre que estés cómodo, recuerda que la falta de sueño solo empeora las cosas!
Aplica hielo o algo frío en la zona
Este truco es más efectivo que aplicar desesperadamente una crema antiojeras o antibolsas por la mañana. Dependiendo de la sensibilidad en la zona, quizá es mejor que optes por algo menos frío que el hielo. Coge cualquier cosa de la nevera que se mantenga fría en contacto con tu piel, como un bote, lata o botellita de agua.
Rodajas de pepino
Este remedio clásico contra bolsas y ojeras resulta efectivo si lo haces con constancia. Corta unas 10 rodajas finas de pepino y deja un par sobre los ojos. Cuando se calienten, cámbialas. Sigue así hasta que se agoten, tras unos 15 minutos.
Lograrás una ligera mejora, aunque los efectos no duran muchos días. Pero, si lo repites todos los días, verás que paulatinamente hay más efectos. Se deben a que las vitaminas del pepino mejoran la pigmentación en la zona, la relajan y difuminan las arrugas finas. Y el frescor del pepino es antiinflamatorio.
Bolsas de manzanilla, té verde o hierbabuena
Es otro clásico, pues tienen propiedades antiinflamatorias. Son especiales útiles en ojeras transitorias, como las debidas a alergias, resfriados o conjuntivitis. Su efecto también es pasajero, por eso sirven para estos problemas agudos.
Uso del contorno de ojos
Las cremas para el contorno son muy efectivas contra las bolsas y ojeras. No a tan corto plazo como aplicar algo frío, sino que mejoran notablemente los efectos de la edad en el cutis, evitando las arrugas y líneas de expresión. No obstante, es importante que comiences a utilizarlas pronto. Los expertos señalan que lo mejor es comenzar a los 20 años.
Aceite de almendras
Es el mejor remedio para las ojeras si tienes la piel seca y quieres evitar las arrugas. El aceite de almendras es rico en vitaminas A, B y E. Para aplicarlo, aplica unas dos gotas para cada ojo y masajea con movimientos suaves antes de irte a dormir, hasta su completa absorción.
Prueba estos trucos para acabar con las bolsas y ojeras, verás que alguno funciona, dependiendo de la naturaleza del problema y tu piel. ¡Así tendrás tu truco perfecto contra las ojeras!